Fiesta
Nadie se sorprendió de verlos llegar juntos, no era la primer vez y seguramente pasaría nuevamente, todos sabían que se llevaban muy bien, incluso se sorprenderían más de verla llegar con su esposo, hombre frio y distante; ella vestía un elegante y ceñido vestido negro, él tenía un traje gris metálico, ella llamaba la atención aun sin proponérselo, a él apenas lo notaban, y así lo prefería, le gustaba pasar desapercibido. Después de los obligados saludos cada uno se sentó en mesas distintas, ella casi de inmediato se rodeo de amigos y amigas, su magnetismo era inmenso, él discretamente bebía agua mineral en un rincón, así trascurría la fiesta, de pronto en el medio de alguna acalorada platica sin importancia ella recibió una llamada, se disculpó y salió de aquel lugar, el silencio de la noche fría contrastaba con la ruidosa fiesta que se celebraba a unos metros, aquella llamada solo fue un par de palabras, ella solo contesto con un impaciente “sí”. Abordó un auto, él estaba al volan...