Me tienes en tus manos...
Me tienes en tus manos y me lees lo mismo que un libro. Sabes lo que yo ignoro y me dices las cosas que no me digo. Me aprendo en ti más que en mi mismo. Eres como un milagro de todas horas, como un dolor sin sitio. Si no fueras mujer fueras mi amigo. A veces quiero hablarte de mujeres que a un lado tuyo persigo. Eres como el perdón y yo soy como tu hijo. ¿Qué buenos ojos tienes cuando estás conmigo? ¡Qué distante te haces y qué ausente cuando a la soledad te sacrifico! Dulce como tu nombre, como un higo, me esperas en tu amor hasta que arribo. Tú eres como mi casa, eres como mi muerte, amor mío. Jaime Sabines No podía faltar el contratiempo, sin embargo todo salio bien, según lo planeado, extrañamente. El plan original contemplaba que nos viésemos durante la ceremonia, no fue así, llegue cuando esta ya había terminado, clásico en mi. Durante todo el camino me invadía el nerviosismo, al llegar se desbordo, mi comportamiento fue mas torpe de lo normal, el verte, tu f...