The world forgetting, by the world forgot
How happy is the blameless vestal’s lot!
The world forgetting, by the world forgot.
Eternal sunshine of the spotless mind!
Each pray’r accepted, and each wish resign’d.
Alexander Pope.
Al salir de la cueva en la que trabajaba, te vi tendida en la hierba tratabas de dormir, cobijándote bajo la sombra del atardecer, huías del terrible calor. Al verte ahí, con tu figura perfecta envidia de las diosas del Olimpo, ni Rafael podría haber imaginado tanta belleza, quise abrazarte, besarte, pero eres ajena e imposible, me arrancaría los dedos con los dientes antes que se atreviesen a profanarte, comprendí de golpe cuanto te quería, cuanto te amaba, cual imposible eres. Sentándome a un costado tuyo, sugerí una cama de oro puro, con sabanas de la más preciosa seda, el colchón más suave del mundo, para que descansaras cuanto quisieras. Apenas me notaste, y con desdén y desinterés despreciaste mis ofertas, poco después te marchabas sin voltear atrás.
Comentarios
Muy interesante. Saludos!!