Querido señor visitador
Con los años
me estoy haciendo
un excelso
casamentero
de antiguos
amores.
Visito en las ciudades
más pobladas
de tres países
a parejas estables
que se cogen la mano
agradecidas
y tienen el detalle de tenerme
en el altar
de sus aparadores
con una foto
de entonces,
muy favorecedora.
He llegado a contar
en hogares felices
seis libros dedicados
de mi puño y letra
con promesa
de amor eterno.
Y en un caso reciente
pude reconocer
la chaqueta de punto
tejida a mano
que regalé a mi amante
por Reyes
llevada por el otro,
y unas manchas de vomitona mía
en el entarimado
de la alcoba
que hoy me está prohibida.
Soy el visitador
de los enamorados.
Si es verdad, como dices,
tú, conciencia,
la que no miente,
que ya no sé amar,
reconoce al menos
que preparo muy bien
a quienes yo renuncio
para las duras pruebas
del amor de verdad.
¿Y no es al final solo una visita? Es pasar por un instante, nadie permanece tanto, nadie nunca se queda, todo es una gran mentira, el dolor es la única verdad, el único que acompaña por siempre y sin condiciones ni permisos. Las promesas, las palabras en los esporádicos encuentros, esas que salían con un gemido y se enredaban en las sabanas, todas esa palabras solo estaban de visita, tu fingías, y yo fingía que no me percataba, Lo sabía todo, sabia la verdad, pero nada podía hacer, fingir demencia es el único camino, no tenía derecho alguno a solicitar nada, cualquier limosna era una fortuna para mi, al fin de cuentas tenia la mejor parte, quería pensarlo, quería creérmelo, la fiesta de cada semana, el compromiso con los familiares, las salidas al cine, a cenar, al centro comercial, el fin de semana fuera de la ciudad, el interés en la vida se fue, perdí lo que quedaba, lo que nunca tuve, tu partida es tan rápida, y la muerte tarda tanto en llegar. Te hace sonreír, quisiera tener ese don.
¿Más víctimas del visitante?
Comentarios
yo tenía un comentario, pero lo olvide jeje aún así pase a leerte de nuevo y ahora me he quedado sin palabras.
Tienes cara de chango !!!
Ojalá y yo aprendiera esto.
Me gustó esta entrada y me hizo ponerme a pensar ¿eh?
Saludos